Pastel de Elote con Ricotta y Nuez

Versión Suave, Cremosa y con Textura

El pastel de elote es uno de esos postres que nunca pasan de moda. Su aroma dulce, su sabor suave y su textura húmeda lo convierten en una delicia irresistible. En esta versión especial, incorporamos ricotta o requesón suave, lo que le aporta una cremosidad única, y nueces troceadas, que añaden un contraste crujiente delicioso. Además, al no llevar harina de trigo, resulta ideal para quienes buscan opciones sin gluten o menos procesadas.

Ya sea para compartir en reuniones familiares, vender por porciones o simplemente disfrutar en casa con un café caliente, este pastel conquistará a todos con su sabor tradicional y su textura encantadora.


Por qué te encantará esta receta

Este pastel de elote con ricotta y nuez es mucho más que un postre: es una experiencia de sabor y textura que te hará volver por otra rebanada. Aquí te cuento por qué se convertirá en uno de tus favoritos:

  • Textura suave y cremosa gracias a la ricotta y la mantequilla.

  • Sabor dulce y balanceado, sin necesidad de harinas adicionales.

  • Nueces troceadas que aportan ese toque rústico y crujiente irresistible.

  • Se prepara en pocos pasos y con ingredientes sencillos.

  • Es perfecto para cualquier ocasión: desde meriendas hasta celebraciones.

  • Puede prepararse con elote fresco, lo que realza su sabor natural y tradicional.

Es una receta pensada para quienes valoran los postres caseros, con ingredientes nobles y mucho sabor.





Ingredientes

📝 Para un pastel mediano (molde de 22–24 cm), necesitas:

  • 4 tazas de granos de elote fresco (puedes usar congelado bien escurrido si no tienes acceso a fresco)

  • 1 taza de ricotta o requesón suave

  • 1 lata de leche condensada

  • ½ lata de leche evaporada

  • 4 huevos grandes

  • 90 g de mantequilla derretida

  • 1 cucharadita de polvo para hornear

  • 1 cucharadita de esencia de vainilla

  • ½ taza de nueces troceadas

  • Opcional: pizca de sal o canela (para realzar sabores)





Instrucciones

👩‍🍳 Paso a paso para un pastel perfecto:

1. Precalienta el horno

Precalienta el horno a 180 °C (350 °F). Engrasa muy bien un molde redondo o cuadrado. Puedes espolvorear un poco de maicena o avena molida si deseas evitar el uso de harina.

2. Licúa la mezcla base

Coloca en la licuadora los granos de elote, la ricotta (o requesón), la leche condensada, la leche evaporada, los huevos, la mantequilla derretida, el polvo para hornear y la vainilla. Licúa hasta que la mezcla esté suave, cremosa y sin grumos.

💡 Consejo: No sobre licúes si quieres conservar algo de textura del elote.

3. Incorpora las nueces

Una vez licuada la mezcla, vierte en un recipiente y añade las nueces troceadas usando una espátula o cuchara. Mezcla con movimientos envolventes para mantener la aireación.

4. Vierte en el molde

Coloca la mezcla en el molde preparado. Alisa la superficie ligeramente para que el pastel hornee parejo.

5. Hornea con paciencia

Lleva al horno por 50 a 60 minutos, o hasta que esté dorado por fuera y al insertar un palillo en el centro, este salga limpio. Recuerda que la textura interna es húmeda, así que no debe salir completamente seco como en un bizcocho.

6. Deja enfriar y desmolda

Deja enfriar dentro del molde al menos 30 minutos antes de desmoldar para evitar que se rompa. Una vez frío, puedes espolvorear con azúcar glass, canela o acompañar con un poco de crema batida.





Consejos para servir y almacenar

✨ ¿Cómo sacarle el máximo provecho a este pastel?

  • Sirve tibio con un toque de crema batida o helado de vainilla para un postre inolvidable.

  • También es delicioso frío, al día siguiente, cuando los sabores se han asentado.

  • Puedes decorarlo con un puñado extra de nueces tostadas, un hilo de miel de agave o incluso un poco de dulce de leche.

🥶 ¿Cómo conservarlo?

  • Guárdalo en un recipiente hermético en el refrigerador hasta por 4-5 días.

  • Si deseas congelarlo, corta en porciones, envuelve cada una en papel film y guarda en el congelador hasta por 1 mes.

  • Para recalentar, bastan unos segundos en el microondas.


Notas útiles

  • Si usas elote enlatado, asegúrate de escurrirlo muy bien para evitar que la mezcla quede aguada.

  • Puedes usar mantequilla con sal, pero omite la pizca adicional de sal en ese caso.

  • El requesón también funciona muy bien si no encuentras ricotta. Solo asegúrate de escurrirlo si tiene mucho líquido.

  • Las nueces se pueden sustituir por almendras, piñones o incluso semillas de girasol tostadas.

  • Añadir una pizca de canela o nuez moscada le da un perfil más especiado, ideal para climas fríos.





Preguntas frecuentes

¿Puedo usar elote congelado o enlatado?
Sí, aunque lo ideal es usar elote fresco. Si usas congelado, descongela y escurre bien. Si es enlatado, asegúrate de que no tenga conservadores con sabor.

¿Este pastel es libre de gluten?
Sí, siempre y cuando verifiques que el polvo para hornear y la esencia de vainilla no contengan gluten. No lleva harina de trigo.

¿Puedo hacerlo sin nueces?
¡Por supuesto! Las nueces son opcionales, aunque aportan una textura muy especial. Si prefieres una versión más suave, simplemente omítelas.

¿Qué tipo de molde es mejor?
Un molde redondo de 22–24 cm o uno rectangular tipo “cake” funciona muy bien. Solo asegúrate de engrasarlo correctamente.


Conclusión

El Pastel de Elote con Ricotta y Nuez es una joya entre los postres tradicionales reinventados. Es suave, cremoso, con un dulzor natural gracias al elote y la leche condensada, y tiene ese toque crocante que lo hace único. Su preparación sencilla lo convierte en una receta perfecta tanto para principiantes como para expertos en la cocina.

Ya sea que lo prepares para vender, compartir o simplemente darte un gusto, este pastel tiene todo para conquistar. Y lo mejor: es una alternativa sin harina de trigo, que cuida tu digestión y mantiene todo el sabor que tanto nos gusta.

No esperes más para probarlo. ¡Tu cocina olerá a hogar y a tradición en menos de una hora!

Leave a Comment