¿Buscas unas galletas que combinen ese sabor reconfortante de lo casero, con una textura perfecta y un toque especial? Entonces prepárate para enamorarte de estas galletas de canela y nuez: tiernas por dentro, crujientes por fuera, con un aroma cálido que envuelve toda tu cocina. Son ideales para acompañar un café, regalar o simplemente darte un gusto. ¡Una receta que promete conquistar a todos!
Por qué te encantará esta receta
Estas galletas tienen todo lo que podrías desear:
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Una textura equilibrada: el exterior ligeramente crujiente contrasta con el interior suave y esponjoso.
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Un sabor profundo y aromático gracias a la mezcla de canela y nuez.
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Se preparan con ingredientes sencillos que probablemente ya tienes en casa.
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Son perfectas tanto para el día a día como para ocasiones especiales.
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Se conservan por días, lo que las convierte en una excelente opción para preparar con antelación.
Si eres amante de las recetas tradicionales con un giro especial, esta receta es para ti.
Ingredientes
Aquí tienes todo lo que necesitas para preparar unas 20-24 galletas, dependiendo del tamaño:
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2 tazas de harina de trigo
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100 g de mantequilla a temperatura ambiente
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½ taza de azúcar blanca
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¼ taza de azúcar moreno (opcional, pero aporta un sabor más profundo)
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1 cucharadita de canela en polvo
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½ taza de nueces finamente picadas
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1 huevo
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1 cucharadita de polvo para hornear
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1 pizca de sal
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1 cucharadita de extracto de vainilla
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Azúcar y canela extra para espolvorear
Instrucciones
Sigue estos pasos para preparar unas galletas que te harán volver a la infancia:
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Precalienta el horno a 180 °C (350 °F) y prepara una bandeja con papel encerado o una lámina de silicona.
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Bate la mantequilla con el azúcar blanca y el azúcar moreno (si decides usarlo) hasta obtener una mezcla cremosa y suave. Este paso es clave para lograr una textura ligera.
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Agrega el huevo y la vainilla, y bate hasta integrar completamente.
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En un bol aparte, mezcla la harina con la canela, el polvo para hornear y la sal.
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Incorpora poco a poco los ingredientes secos a la mezcla húmeda, mezclando suavemente hasta obtener una masa uniforme.
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Añade las nueces picadas y mezcla bien para que se distribuyan por toda la masa.
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Forma bolitas pequeñas del tamaño de una nuez y colócalas sobre la bandeja preparada. Aplástalas ligeramente con los dedos para darles forma.
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Hornea durante 12-15 minutos, o hasta que los bordes estén dorados. No las sobrehornees: deben mantenerse suaves en el centro.
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Al sacarlas del horno, espolvorea inmediatamente con una mezcla de azúcar y canela. Este toque final las hace irresistibles.
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Deja enfriar completamente sobre una rejilla antes de guardar o servir.
Consejos para servir y almacenar
Estas galletas son tan versátiles que las puedes disfrutar de muchas formas:
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Con café, té o leche caliente: el maridaje ideal.
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Como postre ligero luego de una comida familiar.
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Para regalar: colócalas en un frasco de vidrio con un lazo bonito.
Almacenamiento
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Guárdalas en un frasco hermético a temperatura ambiente por hasta 5-6 días.
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Si prefieres conservarlas más tiempo, puedes congelarlas una vez frías, separadas por papel encerado, en una bolsa sellada. Duran hasta 2 meses.
Notas útiles
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Si quieres un sabor más especiado, puedes añadir una pizca de nuez moscada o clavo de olor molido.
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Puedes sustituir las nueces por almendras, pecanas o incluso chispas de chocolate si buscas una variante diferente.
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Asegúrate de que la mantequilla esté bien blanda pero no derretida, para que la textura final sea ideal.
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No sobremezcles la masa una vez agregues la harina, ya que esto puede endurecer las galletas.
Preguntas frecuentes
¿Puedo usar margarina en lugar de mantequilla?
Sí, aunque la mantequilla real aporta un sabor más rico. Si usas margarina, el resultado será más ligero, pero igual de delicioso.
¿Puedo preparar la masa con antelación?
¡Claro! Puedes dejar la masa cubierta en el refrigerador por hasta 24 horas. Solo recuerda dejarla reposar unos minutos a temperatura ambiente antes de formar las bolitas.
¿Se pueden hacer sin huevo?
Sí. Puedes usar una cucharada de yogur natural o puré de manzana como sustituto del huevo. El sabor variará ligeramente, pero la textura seguirá siendo buena.
¿Las nueces deben tostar antes de usar?
No es necesario, pero tostarlas ligeramente en una sartén seca intensifica su sabor y las hace aún más crujientes.
Conclusión
Estas galletas de canela y nuez al estilo casero no solo son fáciles de preparar, sino que también están llenas de ese sabor que reconforta y alegra cualquier momento del día. Con una mezcla perfecta de especias, textura y dulzura, se convertirán en una de tus recetas favoritas para repetir una y otra vez.
Son ideales para compartir, regalar o disfrutar con un buen café mientras te tomas un momento para ti. ¿Qué esperas para prepararlas? Ponte el delantal, precalienta el horno y deja que el aroma de la canela y las nueces recién horneadas llene tu hogar.