Postre clásico con textura sedosa y sabor profundo. ¡Se derrite en la boca!
¿Quién puede resistirse a un buen flan? Y si es un flan napolitano cremoso, ¡menos aún! Este postre tradicional mexicano combina lo mejor del flan clásico con un toque especial: queso crema, que le da una textura aún más suave, un sabor más intenso y ese acabado que prácticamente se derrite en la boca. Si buscas una receta fácil, con ingredientes accesibles y resultados espectaculares, este flan será tu nuevo favorito.
Por qué te encantará esta receta
El flan napolitano es uno de esos postres que siempre triunfan en la mesa. Tiene todo lo que amamos:
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Una textura sedosa, cremosa y ligeramente firme.
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Un sabor profundo y equilibrado entre el dulzor de la leche condensada, el toque lácteo del queso crema y la vainilla.
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Un caramelo dorado que se derrite y baña cada porción al servirlo.
Además, es económico, fácil de preparar y perfecto para preparar con antelación. ¡Ideal para reuniones familiares, celebraciones o simplemente para consentirte en casa!
Ingredientes
Para 8–10 porciones generosas, vas a necesitar ingredientes simples que probablemente ya tienes en tu despensa:
Para el caramelo:
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1 taza (200 g) de azúcar
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2–3 cucharadas de agua (opcional, para facilitar la disolución)
Para el flan:
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1 lata de leche condensada (397 g)
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1 lata de leche evaporada (354 ml)
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190 g de queso crema (a temperatura ambiente, para mejor integración)
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4 huevos
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1 cucharada de extracto de vainilla
Instrucciones
🔥 1. Preparar el caramelo
Este paso le dará ese toque brillante y sabor tostado característico.
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Coloca el azúcar (y el agua si decides usarla) en una sartén a fuego medio.
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Cocina sin remover hasta que el azúcar se derrita y tome un color ámbar dorado.
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Vierte de inmediato en el fondo de un molde de 20–22 cm.
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Inclina el molde con cuidado para cubrir bien la base.
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Deja enfriar unos minutos hasta que se endurezca.
⚠️ Consejo: No descuides el caramelo; puede pasar de dorado a quemado en segundos.
🥣 2. Mezclar los ingredientes del flan
Aquí se une la magia cremosa del queso con la dulzura de la leche condensada.
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En una licuadora, coloca la leche condensada, leche evaporada, queso crema, huevos y vainilla.
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Licúa durante unos segundos hasta que la mezcla esté homogénea y sin grumos.
¿Sin licuadora? Puedes hacerlo con batidora o a mano, aunque el resultado será un poco menos suave.
🛁 3. Hornear a baño maría
El baño maría ayuda a que el flan se cocine de forma pareja y mantenga esa textura perfecta.
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Vierte la mezcla sobre el caramelo endurecido en el molde.
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Coloca este molde dentro de una bandeja más grande con agua caliente que llegue a la mitad del molde interior.
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Hornea en horno precalentado a 180 °C (350 °F) durante 50–60 minutos.
Sabes que está listo cuando al insertar un palillo, este sale limpio o con apenas residuos cremosos.
❄️ 4. Enfriar y desmoldar
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Retira el molde del horno y deja enfriar completamente a temperatura ambiente.
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Luego, refrigéralo durante al menos 4 horas, aunque lo ideal es dejarlo toda la noche.
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Para desmoldar, pasa un cuchillo por los bordes del molde, coloca un plato encima y voltea con cuidado.
🎉 ¡El caramelo líquido cubrirá el flan como una deliciosa capa brillante!
Consejos para servir y almacenar
🥄 Cómo servir:
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Sírvelo frío, cortado en porciones triangulares.
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Acompaña con crema batida, frutas frescas (como fresas o frambuesas), hojas de menta o un poco de ralladura de limón para un toque cítrico.
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Si quieres un acabado más elegante, puedes espolvorear un poco de azúcar glas por encima justo antes de servir.
🧊 Cómo almacenar:
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Guarda el flan en el refrigerador cubierto con film plástico o en un recipiente hermético.
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Dura hasta 5 días sin problema, manteniendo su textura y sabor.
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No se recomienda congelar, ya que la textura puede cambiar.
Notas útiles
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Si no tienes queso crema, puedes sustituirlo por queso mascarpone o incluso por una mezcla de yogur griego natural sin azúcar.
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Para un sabor más intenso, puedes añadir ralladura de naranja o canela molida a la mezcla antes de hornear.
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¿Te preocupa que el flan se agriete? Asegúrate de que el horno no esté muy caliente y que el baño maría tenga suficiente agua durante todo el horneado.
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Para una textura ultra lisa, cuela la mezcla de flan antes de verterla al molde.
Preguntas frecuentes
❓ ¿Puedo hacer el flan sin horno?
Sí, puedes hacerlo al baño maría en la estufa con una olla grande. Tapa bien el molde con papel aluminio y cocina a fuego muy bajo por 1 hora y 15 minutos aproximadamente.
❓ ¿Se puede usar otro tipo de molde?
Claro. Puedes usar moldes individuales o uno de silicona. Solo asegúrate de que sean aptos para baño maría y soporten el calor del horno.
❓ ¿El flan napolitano lleva chocolate?
A pesar de su nombre, no lleva chocolate. El término “napolitano” hace referencia al estilo cremoso y enriquecido con queso crema, no a los sabores del helado napolitano.
❓ ¿Por qué se me hizo aguado el flan?
Esto puede pasar si no se cocinó lo suficiente o si la mezcla quedó mal integrada. Siempre verifica con un palillo y asegúrate de licuar bien todos los ingredientes.
Conclusión
Este flan napolitano cremoso es mucho más que un simple postre: es una experiencia para el paladar. Su textura suave, ese toque irresistible del caramelo y la riqueza del queso crema hacen que cada bocado sea inolvidable. Ya sea que lo prepares para una ocasión especial o para darte un gusto en casa, ¡seguro se convertirá en uno de tus favoritos!
Lo mejor de todo es que no necesitas ser experto en cocina para lograr un flan espectacular. Solo sigue los pasos, respeta los tiempos de cocción y deja que el refrigerador haga el resto del trabajo.
¿Estás listo para probar esta delicia? ¡Anímate, prepara tu flan napolitano y deja que todos en casa se enamoren de su sabor!